SEVILLA 14.10.2019 / Jose Manuel García Bautista
El problema de la superpoblación mundial y todo lo que conlleva será un problema en breve para el planeta.
Se estima que en tres décadas el 50% de la población de la Tierra pagará y sufrirá las consecuencias de esta superpoblación.
En 2050 el planeta no podrá sostener a tantas personas y se dejará sentir en la polinización de los cultivos o la renovación del agua reducirán su aportación al bienestar humano.
Zonas como África y Asia tienen la peor parte en todo ello pues será continentes donde la crudeza de todo ello se verá incrementado.
Así se verá afectada la polinización por parte de insectos y aves, la regeneración del agua mediante la retirada del exceso de nitrógeno procedente de la ganadería y la agricultura o la protección que diversas barreras naturales dan en la línea de costa.
“La naturaleza ofrece mucho más a los humanos, en un anterior trabajo planteamos 18 grandes familias de contribuciones naturales.
Pero no hay datos de todas ellas y para todo el planeta” explica el investigador Ikerbasque en el Basque Centre for Climate Change (BC3) y coautor del estudio, Unai Pascual.
La deforestación y avance de la agricultura, la acelerada urbanización o el cambio climático son argumentos reales para explicar todo ello.
Se aplicaron su modelo a tres posibles escenarios: uno en el que las sociedades seguirán basadas en el uso de los combustibles fósiles como ahora, otro emergente que denominaron de rivalidad regional y un tercero protagonizado por la sostenibilidad.
4.450 millones de personas podrían padecer problemas con la calidad del agua por la incapacidad de los distintos ecosistemas de regenerarla.
5.000 millones de humanos comprobarán que baja el rendimiento de sus cultivos por una deficiente polinización.
“Los países en desarrollo, que ya estaban en desventaja social y económica, contaban con la supuestas ventajas del mayor capital natural, pero es aquí donde se degrada más rápidamente”, señala Pascual.
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